Tabla de contenido:
- Cómo aliviar las reacciones a las vacunas
- Posibles reacciones graves
- ¿Qué causa las reacciones a las vacunas?
- Cuándo ir al hospital

La aparición de reacciones después de tomar la vacuna contra el COVID-19 es completamente normal y ocurre debido a la respuesta natural del sistema inmunológico, que produce anticuerpos para combatir la sustancia que se inyectó. Es esta respuesta la que hace posible crear inmunidad, ya que los anticuerpos producidos son los mismos que, en caso de una infección real por COVID-19, combatirán al virus.
Las reacciones a la vacuna suelen aparecer dentro de las primeras 24 horas y las más comunes son:
- Dolor, hinchazón y/o enrojecimiento en el lugar de la inyección;
- Dolor de cabeza;
- Fiebre y escalofríos;
- Me siento cansado;
- Dolor muscular y/o articular.
Estas reacciones pueden durar de 2 a 3 días. En el caso de las vacunas que requieren más de una dosis, las reacciones generales como fiebre, dolor de cabeza y dolor muscular son más frecuentes después de la segunda dosis, mientras que las reacciones de dolor e hinchazón en el brazo pueden ocurrir en todas las dosis. Vea cuántas dosis se necesitan para cada vacuna.

La vacunación es la mejor forma de protegerse frente a una infección grave por COVID-19 y, por tanto, debe llevarse a cabo a pesar de provocar algunas reacciones adversas. La no vacunación no provoca ningún tipo de reacción, pero tampoco protege contra el coronavirus, ni disminuye las posibilidades de una infección grave que puede poner en peligro la vida.
Cómo aliviar las reacciones a las vacunas
Aunque las reacciones a la vacuna COVID-19 pueden ser un poco incómodas y afectar la vida diaria de la persona vacunada, existen algunas formas de paliarlas:
1. Dolor, hinchazón y enrojecimiento en el lugar de la inyección
Para aliviar estos síntomas, basta con aplicar un poco de hielo (cubierto con un paño limpio) en el lugar durante 10 a 15 minutos, varias veces al día. Esto reducirá la inflamación de la zona, aliviando las molestias.
También es importante evitar forzar el brazo vacunado, como levantar pesas, especialmente en los 2 primeros días.
2. Dolor de cabeza y fiebre
Para aliviar el dolor de cabeza y la fiebre es importante descansar. Sin embargo, algunas técnicas naturales pueden ayudar, como colocar un paño humedecido con agua fría en la frente, evitar usar ropa muy caliente y beber té de jengibre o valeriana, por ejemplo. Consulta una lista de los principales tés para aliviar el dolor de cabeza y la fiebre.
Además, y con la orientación de un profesional de la salud, también se puede tomar paracetamol cada 8 horas. Este es un remedio antipirético que te permite bajar la temperatura de tu cuerpo, combatiendo la fiebre.
En caso de que la fiebre dure más de 2 días o si no mejora con el uso de medicamentos, es importante acudir al hospital para identificar la posible causa, iniciando el tratamiento adecuado.
3. Dolor muscular o articular y cansancio
La mejor forma de recuperarse del cansancio y aliviar dolores musculares y/o articulares es descansar lo máximo posible, evitando esfuerzos como levantar pesas, limpiar la casa o hacer ejercicio, por ejemplo.
También es importante garantizar una correcta hidratación y nutrición del organismo, beber abundante líquido y llevar una dieta equilibrada. Los líquidos pueden ser agua, tés, agua de coco o jugos naturales. Vea qué comer para combatir la fatiga.
Posibles reacciones graves
Las reacciones graves a la vacuna COVID-19 son muy raras, pero ocurren principalmente en personas que tienen antecedentes de una reacción grave después de recibir cualquier otro tipo de vacuna.
Estas reacciones pueden aparecer poco después de la vacunación o hasta 4 semanas:
- Reacción alérgica grave, generalmente dentro de los 30 minutos posteriores a la vacunación;
- Formación de coágulos que pueden causar trombosis;
- Inflamación del corazón.
Aunque son muy raras, estas reacciones deben identificarse lo antes posible, para que puedan ser tratadas correctamente, evitando la aparición de secuelas.
En caso de síntomas como dificultad para respirar, hinchazón de la cara, dolor de cabeza intenso, dolor en el pecho o hinchazón en las piernas, es importante buscar ayuda médica.
¿Qué causa las reacciones a las vacunas?
Las reacciones que aparecen después de la vacunación son el resultado de la respuesta normal del sistema inmunitario a la sustancia que se inyectó. Esta sustancia varía según el tipo de vacuna, pero siempre se trata de un material inocuo, capaz de imitar al coronavirus, estimulando la respuesta inmunitaria. Cuando esto sucede, el cuerpo produce anticuerpos que estarán "en espera" en caso de que el coronavirus real ingrese al cuerpo. Obtenga más información sobre cómo funcionan las vacunas, su eficacia y seguridad.
Es común que las reacciones sean más intensas después de la segunda dosis de la vacuna ya que el cuerpo ya tiene anticuerpos de reserva que se produjeron después de la primera dosis. Estos anticuerpos actúan más rápido y con más fuerza contra la sustancia inyectada.
¿Qué significa si no hay reacciones a la vacuna?
No tener reacciones o tener efectos secundarios muy leves no significa que no tenga inmunidad contra el virus. Esto se debe a que la intensidad de las reacciones está relacionada con la forma en que cada sistema inmunitario responde a la vacuna y no con la fuerza de la inmunidad conferida.
La única forma de saber si tienes o no inmunidad contra el COVID-19 es realizando un análisis de sangre para anticuerpos IgG e IgM. Obtenga más información sobre las pruebas de COVID-19.
Cuándo ir al hospital
Es importante acudir al hospital siempre que se sospeche una reacción grave a la vacuna. Además, se debe buscar ayuda médica siempre que:
- La fiebre no disminuye o persiste por más de 3 días;
- La hinchazón y el dolor en el brazo no mejoran después de 3 días;
- Aparecen otros síntomas sugestivos de COVID-19, como tos intensa, f alta de aire o pérdida del olfato.
La vacuna no es capaz de causar COVID-19, sin embargo, algunas personas pueden entrar en contacto con el virus unos días antes o poco después de la vacunación. En estos casos, la inmunidad vacunal aún no está activa y, por tanto, pueden acabar desarrollando COVID-19. La efectividad de la vacuna solo está garantizada 14 días después de la última dosis. Vea otras preguntas comunes sobre la vacuna COVID-19.